jueves, 9 de diciembre de 2010

Cap 1. El reloj

Siempre he pensado que nunca encajaba, que siempre andaba en mi mundo de ensueño. Qué al dibujar, no prestaba atención a nada ni a nadie, y que al estar con las plantas era distinta.
Pues eso es verdad, yo pienso que no soy de esta realidad, que hay algo más importante para mi, que estudiar bellas artes en esta universidad y aún más importante que trabajar en un vivero. Si, si es la vida que me ha tocado vivir, pero... si mi vida fuera otra, si en otra dimensión o en otro tiempo y espacio, yo tengo una vida... no sé, más mágica?.
Solo lo que puedo hacer por ahora es imaginar aquella vida que me gustaría llevar. Ser una rosa tal vez, con ese perfume que larga, llevar alegría a los jardines. Porque algo más maravilloso, que dar alegría, estoy segura; que no existe.
-Flora, llegaron los tíos -me gritaba mi madre adoptiva desde el piso de abajo
-Ya voy Carlota -siempre la he llamado por el nombre, y nunca le he dicho mamá. Ni siquiera de pequeña, no sé porque sera, pero nunca sentí que era mi madre. Aunque se que no es, ella es la que me ha criado.
Baje las escaleras con desgano, ya que ahora venían las mismas conversaciones trilladas, de todas las reuniones familiares. Esos momentos en el que nada extraño sucede, solo comemos, bebemos y hablamos. Siempre la misma rutina, que cansa.
-Oh, pero que bella que está la señorita -dijo una de mis tías, esas típicas tías, que a pesar de que hace 1 día que no te ve, ya te ve más grande, más bella, más todo.
-Aja -dije sin ganas, saludé a uno por uno y luego me senté en el sofá.
Escuche cada conversación, que había en la sala. Una más aburrida que la otra, nada nuevo, nada interesante.
Quería salir de allí de ese lugar, irme lejos de esa reunión.
Llegó mi padre, y cuando todos se revolucianaron solo para ir a saludarlo, encontré el momento perfecto para huir. Me corrí lentamente hacía la puerta de entrada que estaba semi-abierta, ya que mi padre no había tenido tiempo de cerrarla, salí a la calle y comencé a correr y a correr. Llegué a un parque cerca de mi casa, todo estaba oscuro, con niebla. Pero claro ¿a quién se le ocurre ir a un parque a las 11 de la noche? Pues a mi.
Comencé a caminar, oliendo una por una las distintas flores que habían allí. Distraída, caminando, entre medio de las flores, ese era un momento único, inigualable. Pero de repente, algo que brillaba muchisimo, llamo mi atención completamente. Me acerqué al suelo, era pequeño, pero llamativo, era de oro. Y tenía algo dibujado, un ser imaginario que reconocería en todas partes, tenía dibujada un hada. Lo tomé en mis manos, ya que la curiosidad me mataba, y a penas lo toque comenzó a vibrar, y no paraba de vibrar. No me asusté, solo miraba con atención aquel preciado objeto.
De un momento a otro la vibración paró. Lo abrí, con sumo cuidado, y era un reloj. Un reloj viejo, con los números romanos. Seguramente esta preciosura, debe tener un valor único, y yo ahora lo tenía en mis manos. Si alguien lo perdió, no debía de quedarmelo, pero había algo en el que me decía que me lo llevara conmigo.
Me lo quede mirando, con muchisima atención durante un largo tiempo, debatiendo con mi misma que hacer, hasta que por fin decidí guardármelo. Lo metí en mi bolsillo, y comencé el camino de vuelta a mi casa.
Entré con sumo cuidado, y me dí cuenta de que ya los gritos de mis tíos y tías no estaban, de que toda esa manada de animales salvajes se había evaporado.
-¿Ya se fueron? -pregunté extrañada, nadie contestó. ¿Qué hora era?. Instantáneamente saqué el reloj del bolsillo, lo abrí y me fije la hora. Las 10:30. No puede ser, seguramente esta muy mal, ya que cuando salí eran las 11.
Fui hasta la cocina y me fije en aquel reloj grande de pared que teníamos, las 2:30. Oh pero ya era de madrugada ¿cómo? si no estuve mucho tiempo, a lo sumo 30 minutos como mucho.
Subí las escaleras silenciosamente ya que mis padres seguramente estarían durmiendo y al abrir la puerta de mi habitación, mi padre se paró detrás de mi para darme un gran susto.
-Hay -chillé
-Has silencio que tu madre está durmiendo -dijo en susurró mi papá
-Lo siento papá, pero podrías no haberme asustado así.. -le dije con enojada, pero en susurro
-Bueno hija, no me tendrías que tener preocupado hasta ahora. Estábamos en una cena familiar y vos, desapareciste -me dijo mi papá
-Lo se, es que me fui a tomar aire, y me encontré con una cliente del vivero y pues... -dije muy nerviosa, esto de mentir no se me daba. Pero si le decía que me quede estas horas viendo aquel reloj, me iba a tomar por loca.
-No inventes excusas, está bien. Yo igual tenía ganas de salir de esté lugar. -dijo algo divertido -buenas noches -concluyó para luego irse a su cuarto.
Cerré mi puerta, y me senté en la cama. Abrí aquel reloj otra vez, para apreciarlo. Era muy bonito, era único.
Me quedé viendo la hora que marcaba, 1:30. Pero como es que aquel reloj de las 10:30 marcaba la 1:30. Ilógico.
Comencé a darle vuelta para cambiar la hora, pero este estaba muy duro. Cuando al fin logré darle vuelta y llegar a la hora que era, comenzó a vibrar fuertemente, yo sin pensarlo lo tiré en la cama, y comenzó a brillar intensamente. No paraba de brillar y de vibrar. Empecé a asustarme, ya que eso no era normal en un reloj.
Pero cuando comencé a caminar en dirección a la puerta, mirando todavía extrañada aquel reloj. Me dí cuenta que sentada en mi cama había una mujer, pero no una mujer común y corriente, una mujer con unas alas enormes. Las alas eran azules, y los rasgos de su cara perfectos, tenía unas orejas largas y también risos colorados. Estaba vestida con un pequeño vestido, blanco. Ese ser inigualable que se abría paso por mis ojos, era lo más parecido a un hada. Pero de tamaño real. Me quede viéndola estupefacta, ningún sonido podía salir de mi garganta. No era capaz de pestañar, y de casualidad me acordaba de respirar, pero extrañamente me encontraba agitada.
-No te asustes, no muerdo -dijo esta mujercita salida de un cuento. Yo no pude contestarle, ya que no me acordaba con articular palabras. -Es un gusto conocerte Flora, siempre he querido yo, poder tener este honor -dijo mientras hacía una reverencia como si yo fuera una reina. Seguí sin articular palabras, solo verla confundida y fascinada. -Di algo, que me pongo nerviosa -chilló este ser mágico
-Eeeh -es lo único que pudo salir de mis labios
-Algo es algo -dijo mientras se sentaba en una de las dos sillas que yo tenía en mi habitación -Yo sabía que iba ser yo la que te diera a conocer este mundo, soy uno de los factores más importante en mi lugar -dijo contenta -claro soy el único ser que vive en ese reloj -dijo viendo de reojo al reloj
-¿Quién sos? -por fin pude hablar
-Hay, no me presente... soy Atempa, el hada del tiempo -dijo mientras me tendía su mano para estrecharla con la mía a lo que yo no respondí -Vengo de ese reloj, el reloj sin tiempo. Porque en realidad, el tiempo es irrelevante, el tiempo no existe. Porque si te pones a pensar, ¿qué es el tiempo? ¿qué es lo que... -y antes de que pudiera seguir con su monologo aquella criatura charlatana, la interrumpí
-¿Un hada? -dije en un susurró que ni yo llegué a escuchar.
-Si niña, ni que hayas visto un fantasma -dijo sonriente -pues... ¿necesitas que te explique toda la historia?
Yo me limité a asentir con la cabeza.
---------------------------------------------------------------------------------------
Bueno gente ojala les este gustando hasta ahora. Me re inspiré y ando con la imaginación volando a mil por hora.
Ojala les guste y por favor dejen sus comentarios ya que son los que alimentan mis ganas de seguir con esta hermosa novela titulada "Mi mundo de sueños" Ya que yo, solo  se soñar. Porque soñar es crear y desear realidad. Y todo junto LIBERTAD y yo amo la LIBERTAD
Adiós y hasta la próxima mis amigos virtuales (:
Milena...

5 comentarios:

  1. Niña, bueno escribes hermoso!!, no hay comparacion, todo es tan... magico... me da mucho gusto ver tu magnifico blog, creeme que ya soy adicta leerte, me da mucho orgullo ser la primera seguidora de muchas, ten la seguridad de que aqui me tendras siempre comentando, espero estes muy bien, ya sabes cualquier cosa estoy en mi blog, espero luego afiliarte como blog hermano te parece?...

    Nos vemos luego, besos Yess*.*
    PD/ Perdona por tardar tanto en venir, vi el mensaje ayer, pero no entraba mi cuenta de blogger..

    ResponderEliminar
  2. Hola!! Siempre es una delicia leer cosas hechas desde el corazón!! Ánimo con tu blog !!
    Un fuerte abrazo.

    ResponderEliminar
  3. Me encanta lo que tenes escrito hasta ahora, un beso y abrazo. Me seguiré pasando. Besos

    ResponderEliminar
  4. La introducciòn es alucinante. es lo que mas me gustò del cuento seguì asì amor

    ResponderEliminar
  5. me gusta Mucho como escribís Mile, seguí adelante!!!! así nos hacés soñar un poco, Gracias. Seguiré pasando.

    ResponderEliminar

Deja tus palabras de aliento, tu granito de arena... me harás muy feliz ..